Destrucción de Jesusalén, óleo de Francesco Hayez, 1867. (Foto: Wikimedia Commons/obra de dominio público)
Nota de la editora: Global Sisters Report en español presenta Al partir el pan, una serie de reflexiones dominicales que nos adentran al camino de Emaús.
«A unos que elogiaban las hermosas piedras del templo y la belleza de su ornamentación les dijo: “Llegará un día en que todo lo que ustedes contemplan será derribado sin dejar piedra sobre piedra”. Le preguntaron: “Maestro, ¿cuándo sucederá eso y cuál es la señal de que está para suceder?”. Respondió: “¡Cuidado, no se dejen engañar! Porque muchos se presentarán en mi nombre diciendo: ‘Yo soy; ha llegado la hora’. No vayan tras ellos. Cuando oigan hablar de guerras y revoluciones, no se asusten. Primero ha de suceder todo eso; pero el fin no llega en seguida”. Entonces les dijo: “Se alzará pueblo contra pueblo, reino contra reino; habrá grandes terremotos, en diversas regiones habrá hambres y pestes, y en el cielo señales grandes y terribles. Pero antes de todo eso los detendrán, los perseguirán, los llevarán a las sinagogas y las cárceles, los conducirán ante reyes y magistrados a causa de mi nombre, y así tendrán la oportunidad de dar testimonio de mí. Háganse el propósito de no preparar su defensa; yo les daré una elocuencia y una prudencia que ningún adversario podrá resistir ni refutar. Hasta sus padres y hermanos, parientes y amigos los entregarán y algunos de ustedes serán ajusticiados; y todos los odiarán a causa de mi nombre. Sin embargo, no se perderá ni un pelo de su cabeza. Gracias a la constancia salvarán sus vidas”» (Lucas 21, 5-19).
Nos estamos acercando al final del ciclo litúrgico y las lecturas del Evangelio nos sitúan en el desenlace de la vida de Jesús y la persecución sufrida en esos momentos. El lenguaje utilizado es del género apocalíptico, que se usa para referirse a las situaciones límite, allí donde no se vislumbra ninguna esperanza, porque realmente la situación parece sin salida.
Jesús invita a leer el lenguaje apocalíptico de Lc 21, 5-19 no como amenaza, sino como llamada a la fidelidad, comenta la teóloga Consuelo Vélez en su reflexión sobre el Evangelio dominical para la serie Al partir el pan
Si miramos la vida de Jesús, realmente su situación no tuvo salida humana. Lo crucificaron y, efectivamente, murió. Y Jesús dice a los suyos que esa será la suerte que correrán aquellos que le sigan. Incluso, la persecución vendrá de los mismos de su propia casa. Pero apela a la realidad que nos convoca en el seguimiento, a la confianza infinita y la fe en el Dios de la vida: "No se perderá ni un pelo de su cabeza". Por parte de Dios la fidelidad está asegurada; por parte nuestra se espera la constancia y la fidelidad.
Pero justamente estos acontecimientos son muy fáciles de manipular. Conocemos cómo este lenguaje apocalíptico es utilizado por muchos predicadores para infundir miedo haciéndole creer a la gente que esos textos se refieren a las catástrofes actuales, interpretándolas como castigos de Dios por nuestros pecados o anunciando el fin del mundo.
En este texto, Jesús advierte que no nos dejemos engañar. Habrá muchos profetas de calamidades que no tienen nada que ver con el Reino anunciado por Jesús. El fin de los tiempos no será un momento en que Dios, cansado de su creación, nos mande castigos para terminar con todo. Por el contrario, esperamos que todo lo creado sea transformado y participe de la vida plena de comunión con Dios.
Pero, como ya dijimos, textos de este estilo se refieren a la persecución que vivió Jesús y vivirán sus seguidores, porque contrarrestar el mal supone el cambio, la conversión y la libertad humana que siempre puede decidir ir en contra de Dios. Nuestra garantía es la fidelidad de Jesús que ahora se nos pide que sepamos mantener y vivir en nuestra propia vida.
Sea hoy un día para renovar nuestra fidelidad y para no temer las persecuciones si son fruto de testimoniar los valores del Reino porque, de esa manera, Dios nos garantiza que nada se perderá y la salvación que esperamos alcanzar llegará a ser una realidad.
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